Foto: Sales y condimentos / Cortesía El Universal MX.

Reduce la sal para cuidar tu salud

Una vida más sana, con mayor energía, y menos riesgos de contraer enfermedades, son parte de los beneficios de su bajo consumo.

Alrededor de 2,5 millones de muertes en el mundo podrían evitarse, si se redujera el consumo de sal. La ‘Organización Mundial de la Salud’ recomienda un valor inferior a 5 gramos diarios.

Actualmente, las personas consumen entre 9 a 12 gramos, casi el doble de la ingesta sugerida, esta situación conlleva a desarrollar posibles problemas de salud.

Entre ellas enfermedades como hipertensión arterial, cardiopatías, accidentes cerebrovasculares e infartos de miocardio, que pueden darse en cualquier edad.

La sal contiene sodio, y aunque es un nutriente necesario para el volumen plasmático, el equilibrio acidobásico, la transmisión de impulsos nerviosos y el funcionamiento normal de las células; en altas concentraciones puede generar múltiples riesgos para el organismo.

Por tal razón, la ‘OMS’ pretende reducir un 30% el consumo de sal de la población mundial al 2025, con el fin de mejorar la situación sanitaria en la población y prevenir posibles enfermedades.

 

Algunas recomendaciones de la OMS

-Consumir menos de 5 gramos de sal por día.

-Ingerir sólo sal yodada, para el bienestar general y las funciones cerebrales. Es esencial para el desarrollo sano del cerebro del feto y del niño pequeño.

-No agregar sal en exceso durante la preparación de alimentos.

-No poner saleros en la mesa.

-Escoger productos hiposódicos o bajos en sodio.

-La sal marina o refinada, independiente de su origen, tiene concentración de sodio, por tanto es necesario controlar su cantidad a la media recomendada.

-La sal está presente tanto en alimentos elaborados como procesados. Es relevante revisar su concentración, para no añadir valores adicionales.

-Reducir la cantidad de sal no quita sabor a las comidas. Las papilas gustativas se habitúan a su disminución para la degustar los alimentos. 

 

Artículo por:

Jackeline González L.

Copyright ©