Foto: Dubai / Cortesía: Thinglink.

Conozca Dubai, un lugar de fantasía, lujo y esplendor

Un lugar que desborda la imaginación y asombro, entre la amalgama de posibilidades en un maravilloso destino lleno de fantasía y ensueño.

Edificios imponentes, arquitectura futurista, avenidas que cruzan el desierto en medio de palmeras  datileras o neem; y complejos urbanos hechos alrededor del mar o sobre los arroyos Dubai Creek y Khawr Dubayy, atrapan la mirada de quienes observan la magia de esta impactante metrópoli.

Dubai, es la capital del emirato árabe con su mismo nombre, es el centro mercantil y principal puerto de los 7 Emiratos Árabes Unidos del Medio Oriente, está revestida de un encanto especial, por ser un paisaje entremezclado, con lo tradicional y excéntrico. 

Está situada en el Golfo Pérsico entre Abu Dabi, Sharjah y el Sultanato de Omán. Es un espacio con un entorno tropical desértico, donde converge la tecnología, el modernismo contemporáneo y tridimensional.

Es un lugar vanguardista, como sacado de un cuento, donde aguas marinas de color turquesa intenso extienden sus 4.114 km² bajo la ciudad de lujo, en medio de arena, dunas, sol, confort,luces brillantes, inquietantes diseños, suntuosos condominios, y  animales misteriosos que habitan alrededor de las reservas naturales acuáticas y áridas.

Variadas especies como la hiena rayada, la avutarda hubara, el caracal, los halcones, el rice de Arabia, el zorro del desierto, exóticos peces, y más de 300 tipos de aves se desplazan sobre aguas saladas, altas temperaturas, árboles de eucalipto, llanuras, lirios, ghaf y acacias del entorno.

Mientras, autobuses terrestres y marinos, taxis, coches de alquiler, líneas del metro, tranvía y monorriel invaden el asfalto citadino, rodeando los puertos comerciales de basto alcance como Rashid, Jebel Ali, Burj Al Arab y la Palma Jumeirah.

 

Amplia excentricidad

Entre el porte de su gigantesca imagen cosmopolita, resalta el inmenso marco fotográfico, una escultura que encuadra a la región como una obra de arte.

Desde su vista, se destaca la majestuosidad de la gran autopista Sheikh Zaved, que atraviesa la ciudad, conectando las avenidas alternas y carreteras, como un círculo de venas.

En su infraestructura capta la atención el edificio Buri Khalifa, considerado el más alto del mundo por tener 828 metros, así como el centro comercial Dubai Mall, por ser uno de los más grandes del planeta.

Seguido del hotel Burj Al Arab, el primero de siete estrellas en su categoría, rodeado por elegantes  hospedajes y restaurantes bajo el agua y el firmamento, que ofrecen platos de los 5 continentes y especialidades de la casa como mariscos y pescados. Así como variedad de servicios, complejos de mansiones privadas y acceso a sorprendentes playas.

En los cielos se avistan los aviones, que aterrizan en los Aeropuertos de Dubai o Al Maktoum, los más transitados, extensos  y de mayor tráfico a escala internacional. 

Kilómetros de distancia y alrededor de algunas calles, se encuentran comerciantes que ofrecen perlas, textiles, joyas, piedras preciosas, inciensos y perfumes, así como parques de diversiones temáticos como el Zabeel, Creekside, Safa, Wild Wadi y Dubai Miracle Garden.

También se encuentran el Museo, el Acuario con más de 100 criaturas marinas y las penínsulas e islas artificiales de World Island que asoman asombrosamente entre el territorio.

El brillo resplandece en el horizonte soleado, mientras en la joyería Kanz,alumbra el récord guiness del anillo de oro más grande que ha sido creado, con un metro de diámetro, 60 centímetros de ancho y 64 kilos de peso.

Es así como Dubai desborda la imaginación y el asombro, entre la amalgama de posibilidades que ofrece esta maravillosa ciudad llena de fantasía y esplendor como si fuera un sueño.

 

Crónica por:                                                                                           

Jackeline González L.                                                                               

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